Ubisoft responde a las acusaciones de abuso en el estudio externo
Ubisoft ha emitido una declaración que expresa una profunda preocupación con respecto a las acusaciones de abuso mental y físico en Brandeville Studio, un estudio de apoyo externo que contribuyó al desarrollo de Assassin's Creed Shadows . La gente del canal de YouTube hace que los juegos publiquen un video que detalla estas inquietantes afirmaciones, que incluyen acusaciones de abuso severo en el lugar de trabajo perpetrado por Kwan Cherry Lai, el comisionado y esposa del CEO de Brandoville.
El informe alega un patrón de comportamiento abusivo, que incluye abuso mental y físico, prácticas religiosas forzadas, privación del sueño y coerción de autolesión contra la empleada Christa Sydney. Otras acusaciones de otros empleados de Brandoville describen la retención salarial, el exceso de trabajo excesivo de un empleado embarazado (lo que resulta en un parto prematuro y la muerte posterior del niño) y otros casos de maltrato.
Brandoville Studio, fundado en 2018 y con sede en Indonesia, dejó de operar en agosto de 2024. Según los informes, los informes de abuso se remontan a 2019, tiempo durante el cual el estudio trabajó en proyectos como Age of Empires 4 y y Assassin's Creed Shadows . Las autoridades indonesias actualmente están investigando estas afirmaciones y buscan cuestionar a Kwan Cherry Lai, aunque su ubicación actual en Hong Kong puede complicar el proceso. <-1>
Este incidente subraya el tema continuo de abuso dentro de la industria de los videojuegos. Numerosos informes de acoso, abuso y malas condiciones de trabajo continúan surgiendo, destacando la necesidad urgente de protecciones de empleados más fuertes y mecanismos de responsabilidad. La situación en Brandoville sirve como un marcado recordatorio de los problemas sistémicos que requieren atención inmediata y una reforma integral para garantizar un entorno de trabajo más seguro y más ético para todos los desarrolladores de juegos. Las consecuencias a largo plazo para las víctimas como Christa Sydney y la necesidad de justicia siguen siendo inciertas.